Reciban esta invitación para que nos acompañen a la charla que sostendrá Pablo Boullosa sobre la relación de la Literatura y uno de los medios electrónicos por excelencia: la televisión. Los esperamos. Para mayor información, dar clic en la imagen.
Entrada libre.
¿Quién es Pablo Boullosa?
Pablo Boullosa nació en la Ciudad de México en 1963. Ha ejercido los más variados oficios: mesero, vendedor de libros, acólito, arquitecto, empresario, juez de concursos de belleza, ayudante de cocina, productor de teatro y maestro universitario — en orden de decadencia.Ha publicado artículos en las mejores y en las peores publicaciones del país, como Reforma, Letras libres, Este País, Confabulario, Vuelta, Viceversa, Textual, Marie Claire, Harper’s Bazaar, etc. Es autor de un libro de poemas que el pudor impide recordar.Representó a México en The 1996 Asia Pacific Conference of Young Leaders, celebrada en Manila, Filipinas. Durante 10 años fue director del centro cultu-bar El hijo del cuervo. En radio fue productor y conductor del programa 90 Kinkies, de Ondas del Lago.En 2001 fue guionista, conductor y director de El Gimnasio: texto, sudor y páginas, transmitido por Canal 22. En 2002 fue conductor y guionista de La barra de letras, un hito en la televisión cultural mexicana.Ese mismo año fue conductor en la primera ceremonia de entrega de Las lunas de El Auditorio Nacional, junto a Rebeca de Alba y Andrés Bustamante. Desde febrero de 2003 escribe y conduce La dichosa palabra también para Canal 22. Desde julio de 2004 escribe y conduce Domingo 7, programa cultural de Televisión Azteca. En el noticiero a.m. de esta misma empresa encarna al Marchante de Libros. En 2003 publicó en edición privada 40 y Safo, un estudio sobre distintas versiones de un poema de la poeta griega. En 2005 publicó sus versiones de los Poemas de amor de Marichiko de Kenneth Rexroth en editorial Verdehalago. En estos momentos prepara un libro misceláneo que cambiará al mundo, como lo cambia una mariposa que agita sus alas en el jardín. Pablo Boullosa afirma que, para ser franco, no hace falta ser francés.
